Hace dieciseis años terminamos nuestros estudios superiores, y la verdad recuerdo muchos momentos en las aulas. Bueno parte de la vida universitaria, no solo es exclusiva al estudio, sino también a las relaciones sociales; por ello es que en nuestra promoción Geografía 87, uno de los valores que primó fue el compañerismo y la amistad.
A pesar de diferencias ideológicas, de gustos, de apreciaciones. Indudablemente también de nuestras preferencias en el fútbol, siempre mantuvimos una buena cordialidad.
Si mal no recuerdo debo reconocer que varios de mis compañeros eran hinchas del equipo blanquiazul, bueno nadie es perfecto, y otros eramos hinchas del mejor equipo del mundo, es decir de la "U".
Pues bien, en esta imagen están dos de mis mejores amigos de la Universidad, don Felipe Sotelo y su incondicional don Arnaldo Caro acompañados por una preciosa ñaña; de mas está decir que estos dos buenos compañeros son hinchas del Alianza Lima, el equipo del pueblo, del futbol quimboso, del buen toque y de la alegría, claro que eso era cuando es sus filas estaban Cubillas, Sotil, La Rosa, Jaime Duarte, Gonzales Ganosa y los Potrillos. Hoy mantienen algo de esa identidad, bueno es mi apreciación.
Lo cierto es que con estos dos muchachones y otros más nos enfrentabamos en unas pichangas, a veces interminables, muchas veces eramos compañeros en un mismo equipo, otras en equipos diferentes, y allí eran verdaderos clásicos. Eran partidos que sacaban chispas, ojalá volvamos a repetir esos clásicos, aunque se que ya no correremos como antes, pero que celebraremos los goles como nadie imagina, de eso no tengan dudas. Pues a jugar ese clásico.
Que así sea.
